Santo Domingo RD
Los documentales son cine, son obras cinematográficas de la misma categoría estética y de producción que una obra fílmica de ficción, pero por mucho tiempo, los amantes del cine, al momento de pagar una entrada de cine, el documental no figura como primera opción.
Es un gravísimo error vigente por falta de: criterio, conocimiento y por muchos documentales francamente deficientes que se vieron por años en la televisión doméstica.
No es la primera vez que la problemática social, geográfica y ambiental de Haití y República Dominicana, es tocada en un documental.
El más reciente de estos trabajos fue Isla de plástico Jose María Cabral y Nashla Bogaert en 2019, arrojando un cuadro bastante crudo.
Isla de dos repúblicas:
Ha elevado barra de calidad del documental dominicano, al lograr una obra audiovisual de calidad internacional, elevando a la gran pantalla temáticamente la cuestión geográfica, histórica y ambiental de los dos países que comparten esta isla del Caribe.
El documental, en el plano artístico y técnico, marca uno de los referentes más altos como producto fílmico, logrando un espectáculo impresionante en el marco de un mensaje medioambiental tan urgente como imperativo.
Todo el trabajo pesa sobre un texto que resume tanto validez en sus datos y enfoques, como belleza en sus giros literarios, producto del trabajo de dos profesionales reconocidos en áreas: Frank Moya Pons (historiador y sociólogo) y Rey Andújar (narrador), quienes desarrollan una crónica histórica que describe la cantidad de ingenios que se establecieron en Haití (más de 700), además de una de las favelas más grandes del mundo en torno a Puerto Príncipe. Ver eso es desgarrador.
Pese a exponer un tema tan dramático y desolador como el proceso de desertificación de zonas de Haití y Republica Dominicana Isla de dos Republica logra un enfoque optimista y presenta a las poblaciones de ambos pueblos con tomas signadas por la esperanza, el deseo de vivir y alejadas de los estereotipos que se han formulado desde ambas partes para distanciar los pueblos.
Apelando a una fotografía de Leo Tamargo que plasma vivo los colores del Caribe, el documental se desarrolla con un tratamiento visual impecable, resaltando el cromatismo de la isla en la cual incluso sus lomas deforestadas, se bien dignas.
Montas concibió un proyecto que impresiona por el tratamiento que da a medio ambiente, historia y geografía común.
Palacio del Cine inició la proyección de Isla de dos repúblicas, (Héctor Ulises Montas) el documental que ofrece impresionantes imágenes aéreas de ambos países tomadas con Cámara Ultra-Estable Cineflex, procurando llevar su mensaje ambiental y artístico a miles de personas preocupadas por la situación del medioambiente en la isla.
Héctor Ulises Montas es cineasta, hijo del presentador de televisión Héctor Montas (EPD) recordado por la producción de programas infantiles en Rahintel y otros canales, que se ha especializado en documentales educativos de gran valor social.
El documental es auspiciado por Centro Comercial Nacional (CCN, por medio Supermercados Nacional y de su marca Orgullo de mi tierra).
No es la primera vez que la problemática social, geográfica y ambiental de Haití y Republica Dominicana, es tocada en un documental.
El más reciente de estos trabajos fue Isla de plástico Jose María Cabral y Nashla Bogaert en 2019, arrojando un cuadro bastante crudo.
José Rafael Sosa