Keir Starmer ha prometido utilizar toda la fuerza de la ley contra el «violento accionar de extrema derecha» después de que «bandas merodeadoras con la intención de violar la ley» causaran violencia en ciudades y pueblos del Reino Unido el domingo.
En Rotherham, un grupo de 700 personas rodeó un hotel Holiday Inn Express, donde algunos prendieron fuego, rompieron ventanas y lograron entrar al edificio donde se alojaban los solicitantes de asilo.
La policía antidisturbios también respondió a escenas violentas en Middlesbrough, Bolton, Hull y Weymouth, entre otras partes del Reino Unido.
El primer ministro prometió hacer «lo que sea necesario para llevar a estos matones ante la justicia» cuando se dirigió a la nación tras los disturbios en curso en todo el país, diciendo a los involucrados que «se arrepentirán» de haber participado.
El discurso de Sir Keir se produce después de un sexto día de creciente violencia en respuesta al apuñalamiento fatal de tres niñas en Southport la semana pasada.
«La gente de este país tiene derecho a estar segura, y sin embargo hemos visto comunidades musulmanas atacadas, ataques a mezquitas», dijo el primer ministro el domingo.
«Otras comunidades minoritarias señaladas, saludos nazis en la calle, ataques a la policía, violencia desenfrenada acompañada de retórica racista, así que no, no voy a dudar en llamarlo por su nombre: matonismo de extrema derecha».
Desde el sábado se han producido 147 detenciones.
En Rotherham, al menos diez agentes de policía resultaron heridos y uno quedó inconsciente después de que manifestantes antiinmigración arrojaran tablones de madera a los agentes y los rociaran con extintores, dijo la policía de South Yorkshire.
Algunos miembros del grupo rompieron las ventanas para poder acceder al Holiday Inn Express y prendieron fuego a un contenedor de gran tamaño .
El oficial que quedó inconsciente sufrió una herida en la cabeza, dijo la fuerza, añadiendo que al menos otros dos tenían presuntamente huesos rotos.
Los empleados del hotel y los residentes, algunos de los cuales son solicitantes de asilo, estaban «aterrorizados», pero no se reportaron heridos, dijo la policía.
Una persona ha sido detenida bajo sospecha de delitos contra el orden público.
La ministra del Interior, Yvette Cooper, calificó las escenas de «absolutamente espantosas» y dijo que la policía cuenta con el respaldo del gobierno para tomar «las medidas más enérgicas».
En un segundo hotel en Tamworth, Staffordshire, los oficiales dijeron que estaban lidiando con «actos violentos de matonería» el domingo por la noche.
La gente en el lugar estaba lanzando misiles, rompiendo ventanas, provocando incendios y apuntando a los agentes de policía, dijo la policía de Staffordshire.
Mientras tanto, un grupo de alborotadores en Middlesbrough rompió las ventanas de casas y coches y lanzó objetos a los oficiales .
En Dorset, 600 personas de bandos opuestos se reunieron en el paseo marítimo de Weymouth. Los agentes dijeron que se había producido un «pequeño número de incidentes de poca importancia», y que un hombre había sido detenido por un delito contra el orden público .
La policía del Gran Manchester emitió una orden de la Sección 60AA en la ciudad que exige a las personas «quitarse las mascarillas que se usan para disfrazar u ocultar su apariencia». Estará en vigor hasta las 10 p. m. del domingo.
La violencia sigue a escenas similares de disturbios en Southport, Belfast, Hartlepool, Hull, Liverpool, Stoke-on-Trent, Nottingham, Sunderland y otros lugares a principios de semana.
En un comunicado del domingo, el Ministerio del Interior ofreció a las mezquitas mayores protecciones como parte de un nuevo proceso, bajo el cual dijo que se puede solicitar un despliegue de «seguridad rápida» para permitir el regreso al culto lo más rápido posible.
Sir Keir indicó que la respuesta a la violencia podría reflejar elementos de cómo se manejaron los disturbios de 2011, cuando él era director del Ministerio Público.
«Tenemos acuerdos permanentes para la aplicación de la ley, lo que significa que podemos lograr arrestos… y condenas muy rápidamente», dijo.
«Yo mismo fui parte de eso en 2011 cuando era director del Ministerio Público, y estoy decidido a que haremos lo que sea necesario para llevar a estos matones ante la justicia lo más rápidamente posible».
Los ministros han sugerido que los tribunales podrían sesionar 24 horas para acelerar los procesos judiciales -como lo hicieron en 2011- mientras las fuerzas policiales toman medidas para reclutar oficiales adicionales para enfrentar posibles disturbios.
Fuente: Lucy Clarke-Billings (Noticias de la BBC)
